
Un Año de bonanza
Estar de pie es una prueba al infierno de que Dios está contigo. Sigues firme porque el Señor te ha sostenido en todo momento. En este nuevo año debes soltar tu agenda y tomar la de Dios. En este 2020 no vas a vivir tus planes, vas a vivir lo que el Señor preparó para ti. El que es nacido del Espíritu no sabe de dónde viene ni a dónde va. Es tiempo de que confíes que estas siendo guiado hacia el cumplimiento de tu propósito.
Si 2019 fue un año de olas y vientos contrarios, el 2020 va a ser un año de bonanza. Confía en que Jesús calmará la tempestad y traerá paz a tu vida. Lo que ayer fue una promesa, el día de mañana será un acontecimiento. La fe que tienes para creer que algún día van a pasar las cosas, la puedes usar para creer que algo de parte de Dios puede suceder hoy.
La barca donde estaba Jesús recibió golpes fuertes, pero no se hundió. No importa que tan fuerte sea la adversidad que atravieses, si Jesús está en tu barca puedes vivir confiado. Si los golpes de las olas que recibes provocarán que veas al Señor más de cerca, entonces todo valdrá la pena. Puedes estar seguro que Dios siempre estuvo cerca de ti a pesar de las tormentas. Este año no te va a detener nadie porque el Señor ya te mostró tu propósito, no te bajes de la barca porque Él no lo hará.
En el arca de Noé sucedió algo muy particular, ninguna especie murió atacada por otra, a pesar de que había muchos animales carnívoros y peligrosos. Esto se debe a que estaban en una atmosfera especial creada por Dios. El único lugar en donde quedaba esperanza después del diluvio era dentro del arca. En estos tiempos el único lugar en donde hay esperanza es en la Iglesia. Abre las puertas de tu vida a los demás para traerles esperanza.
En ocasiones Dios antes de cumplir tus sueños, cumplirá los sueños de las personas que te rodean. Esto no debe causar frustración en tu vida. José antes de ser liberado de la cárcel tuvo que interpretar sueños para que alguien más obtuviera su libertad. Ayuda a que la gente que te rodea cumpla sus sueños. Conviértete en un puente que una a las personas con el propósito del Señor para sus vidas..
Desde la niñez empezamos a soñar y a para cumplir esos sueños va a ser necesario aplicar todos los principios que aprendemos en casa. Es en la mesa en donde recibes instrucciones y fundamentos para vivir con valores. Las mesas son importantes para Dios, Él toca la puerta y quiera entrar a cenar en tu mesa. El hijo prodigo lo primero que se acordó, estando entre los cerdos, fue que los siervos comían en la mesa. El oficio de Jesús consistía en fabricar mesas. Al morir una de las cosas que vas a ver en el cielo es una mesa para celebrar las bodas del cordero. La última cena de Jesús fue en una mesa. El Señor traerá restauración a tu casa y va a ser alrededor de la mesa junto a tu familia. Este es un año en donde Dios restaurará tu hogar, traerá descanso a tu vida y te acercará a tu propósito, solo confía en Él.
Efesios 1:15-18: Por esta causa también yo, habiendo oído de vuestra fe en el Señor Jesús, y de vuestro amor para con todos los santos, no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis oraciones, para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria, os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él, alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su herencia en los santos.
Deuteronomio 31:8: Y Jehová va delante de ti; él estará contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas ni te intimides.
Juan 2:1-11: Al tercer día se hicieron unas bodas en Caná de Galilea; y estaba allí la madre de Jesús. Y fueron también invitados a las bodas Jesús y sus discípulos. Y faltando el vino, la madre de Jesús le dijo: No tienen vino. Jesús le dijo: ¿Qué tienes conmigo, mujer? Aún no ha venido mi hora. Su madre dijo a los que servían: Haced todo lo que os dijere. Y estaban allí seis tinajas de piedra para agua, conforme al rito de la purificación de los judíos, en cada una de las cuales cabían dos o tres cántaros. Jesús les dijo: Llenad estas tinajas de agua. Y las llenaron hasta arriba. Entonces les dijo: Sacad ahora, y llevadlo al maestresala. Y se lo llevaron. Cuando el maestresala probó el agua hecha vino, sin saber él de dónde era, aunque lo sabían los sirvientes que habían sacado el agua, llamó al esposo, y le dijo: Todo hombre sirve primero el buen vino, y cuando ya han bebido mucho, entonces el inferior; mas tú has reservado el buen vino hasta ahora. Este principio de señales hizo Jesús en Caná de Galilea, y manifestó su gloria; y sus discípulos creyeron en él.
Lucas 8:22-24: Aconteció un día, que entró en una barca con sus discípulos, y les dijo: Pasemos al otro lado del lago. Y partieron. Pero mientras navegaban, él se durmió. Y se desencadenó una tempestad de viento en el lago; y se anegaban y peligraban. Y vinieron a él y le despertaron, diciendo: !!Maestro, Maestro, que perecemos! Despertando él, reprendió al viento y a las olas; y cesaron, y se hizo bonanza.